Finalmente llega a España la EVCE, la nueva edición de la normativa para puntos de recarga de coches eléctricos.
Se trata de una modificación de la norma IEC 61851-1, creada por la Comisión Electrotécnica Internacional, donde se recogen las características que deben cumplir estos equipos. Con ella se pretende continuar asentando las bases para la transición a la movilidad eléctrica, haciéndola accesible a un público más amplio.
El objetivo de esta nueva legislación es cerciorarse de que todos los puntos de recarga de coches eléctricos vendidos en la Unión Europea cumplan con las exigencias mínimas y las mismas características técnicas y de seguridad. De esta forma, se estandarizan tanto las propiedades como las funcionalidades de estos equipos.
La normativa se sustenta en 3 ideas fundamentales
Equipos más robustos y resistentes
Frente a toda clase de elementos externos que puedan dañarlos, como el polvo, el agua, las temperaturas extremas o los fallos en la tensión eléctrica. Mejorando la tecnología ante estos aspectos se pretende alargar la durabilidad de los puntos de recarga.
Más seguridad para los usuarios
Teniendo en cuenta que cada vez más personas apuestan por instalar puntos de recarga en viviendas y empresas, la nueva normativa para puntos de recarga de coches eléctricos recoge la obligación de estos equipos de contar con sistemas de seguridad integrados como, por ejemplo, protecciones aislantes y contra incendios, entre otras.
Mayor conectividad
Esto se traduce en que, a través de un protocolo de comunicación, los usuarios podrán controlar el sistema de carga y descarga a su gusto, controlando también la potencia del cargador.
Con estas medidas será mucho más sencillo y seguro el proceso de cambio a la movilidad eléctrica para todos.